Guía de cuidados

Cómo limpiar una alfombra de lana es algo que debemos tener en cuenta antes de invertir en una de ellas, y como explicamos en este post, es algo sencillo que incluso podremos hacer en casa. Una de las preguntas más habituales con respecto a las alfombras artesanales es si este tipo de piezas, hechas con materiales naturales y en ocasiones con colores vivos, requiere cuidados especiales para su limpieza y mantenimiento.

Nada más lejos de la realidad. Las alfombras de lana son robustas y duraderas, pues la estructura de sus fibras repele de forma natural la suciedad y la humedad. De hecho, las alfombras naturales se conservan mejor, durante más tiempo y más limpias que cualquier alfombra fabricada con fibras sintéticas. Esto es un hecho más que demostrado: siempre se ha dicho que las alfombras, cuando son buenas, están siempre limpias. Incluso en las casas con más trote.

Y no hay que olvidar que en el caso de la alfombras bereber, éstas no se creaban con fines meramente decorativos, sino que las mujeres las tejían principalmente para conseguir aislamiento, por lo que la excepcional calidad de la lana y del proceso de anudado hace que lleguen a perdurar toda una vida.

Echa un vistazo a nuestra selección de alfombras de lana y enamórate de cualquiera de ellas…

A continuación respondemos las preguntas más habituales que se nos plantean antes y después de comprarlas.

¿Cómo limpiar una alfombra de lana?

1. Rutina de limpieza

Para que tu alfombra de lana siga luciendo impecable durante muchos años es importante una rutina de aireado y aspirado que evitará que se acumule en ella polvo y suciedad. Sólo debes tener cuidado, no utilizar un cabezal con un cepillo muy duro que pueda romper las fibras y bastará con un aspirador de potencia media. Pásalo con cuidado en la dirección de la lana y de vez en cuando también por el reverso.

Si tienes posibilidad, coloca la alfombra de vez en cuando en el exterior para que el aire fresco y el sol abran y refuercen sus fibras. Golpearla con un sacudidor ayudará a eliminar la suciedad acumulada entre ellas.

Un aspecto a tener en cuenta es que las alfombras de lana tienden a perder algo de pelo durante las primeras semanas. Esto es debido a la propia naturaleza de la lana, cuyas fibras “sobrantes” se sueltan formado pelusas que en parte acaban engrosando la alfombra, pero también es normal encontrarlas alrededor de esta al principio, hasta que la alfombra se estabiliza. Un aspirado normal es suficiente para retirarlas. No se debe cepillar la alfombra en exceso para intentar eliminar estas pelusas, ya que romperemos más sus fibras y provocaremos un debilitamiento de la misma. Cuidado, sobre todo, con las alfombras antiguas.

2. ¿Cómo eliminar una mancha de una alfombra de lana?

Las manchas… esas inevitables enemigas de las alfombras, que a menudo damos por imposibles cuando en realidad no lo son.

Si tenemos manchas sólidas lo más habitual es que estas desaparezcan cepillando la zona con cuidado y aspirando después la alfombra.

En caso de que la mancha persista, habría que realizar a continuación una limpieza en húmedo como explicaremos a continuación.

Si es un líquido lo que ha caído sobre la alfombra, es esencial actuar rápido, poniendo papel absorbente, algo de sal o bicarbonato sobre ella. Después la aspiraremos y en caso de que la mancha siga siendo visible deberemos tratarla con jabones preferentemente naturales (el pH de la lana es ácido), como una espuma de champú suave o una mezcla de agua con vinagre, siempre con mucho cuidado para no dañar la lana. Con ayuda de una esponja o cepillo suave realizaremos movimientos de fuera hacia dentro para que la mancha no se extienda y finalmente aclararemos bien el jabón.

Debemos tener especial cuidado al utilizar productos químicos que puedan dañar los colores o estropear la estructura de la lana dejándola apelmazada y sin elasticidad.

Tras realizar esta limpieza, debemos dejar secar bien la zona para comprobar si la mancha ha desaparecido o si tenemos que repetir el proceso.

En caso de manchas difíciles (tinta, café, vino etc) se recomienda ir probando con los productos habituales (detergente para ropa delicada, quitamanchas, agua oxigenada, alcohol…) según el tipo de mancha y siempre con precaución.

3. ¿Puedo lavar una alfombra bereber en casa?

Con el uso y el pisado es normal que la lana se vaya aplastando y apelmazando, perdiendo esponjosidad y textura. Cuando esto ocurre puede ser conveniente lavar la alfombra de lana totalmente para devolverle su condición original. En función del uso que le demos: si se pisa con zapatos, si hay mascotas en casa, si está en una casa o en un piso etc, será necesario lavarla con más o menos frecuencia.

Y sí, siguiendo una serie de recomendaciones y disponiendo del espacio adecuado podremos hacerlo nosotros mismos en casa y nuestra alfombra quedará como nueva. No recomendamos limpiar nosotros mismos las alfombras vintage, por tratarse de piezas más antiguas y delicadas.

En cualquier caso recomendamos una limpieza profunda en manos de un buen profesional cada dos o tres años, contáctanos si necesitas un especialista.

¿Cómo lavar una alfombra de lana en casa?

Lo primero será aspirarla bien, sacudirla y golpearla para eliminar el polvo entre las fibras. Si disponemos del sitio adecuado, en el exterior, a continuación la mojaremos bien y una vez empapada aplicaremos un jabón suave, frotándola suavemente con ayuda de un cepillo o escoba de cerdas blandas igualmente en ambas direcciones y también por el reverso.

Vamos eliminando la espuma con agua abundante hasta que salga limpia y al acabar enrollamos la alfombra sobre sí misma para escurrirla todo lo posible. Finalmente la estiramos y colgamos al sol, debemos asegurarnos de que la alfombra esté totalmente seca antes de volver a colocarla.

Esto mismo es lo que hacen los artesanos al finalizar el trabajo, quedará como nueva!

¿Y cómo lavar una alfombra de algodón?

En el caso de las alfombras hechas de algodón, como es el caso de nuestras Boucherouite, recomendamos seguir los mismos consejos que para las alfombras de lana, teniendo especial cuidado con los productos utilizados y la temperatura del agua a la hora de lavarlas para que no se mezclen sus colores. Aunque nuestra recomendación es lavarlas a mano, en el caso de querer lavar estas alfombras de algodón en la lavadora podemos hacerlo con agua fría y programa para ropa delicada.

Conclusión

Como ves, el cuidado de estas alfombras no tiene secretos. Sigue estas sencillas recomendaciones y sabrás cómo limpiar una alfombra de lana para disfrutar de ella durante muchos años!